- INTRODUCCIÓN
En relación con el escenario de una Unión Europea a dos velocidades, se remite la siguiente valoración.
- ANÁLISIS
Estos días se produjo la reunión en Versalles de los cuatro países con más peso en la UE, Alemania, Francia, Italia y España. Venía precedida por la salida de Gran Bretaña de la UE y tras la presentación del libro blanco en la Eurocámara, donde se detallaban cinco escenarios de futuro para la Unión Europea.
De todos los escenarios planteados, el preferido por este núcleo duro de países es el escenario de integración a dos velocidades, que entre otras cosas permitiría saltarse el veto de los Gobiernos más euroescépticos. Otros beneficios serían la preservación de la unión política, y significaría que algunos países reforzarían su integración entre ellos si así lo desean, situación que ya se da con la moneda común, o el espacio Schengen.
En esta situación habría países que podrían avanzar más rápidamente en su integración en cuestiones varias como defensa, justicia, fiscalidad. Otros países podrían en teoría unirse a este grupo de países más integrados en una etapa posterior.
Sin embargo, desde el punto de vista negativo, este escenario también supone la aparición de más divisiones y diferencias de derechos dentro de los miembros, y por tanto más complicaciones en la gestión de un proyecto común como lo es la UE.
De las distintas variables que afectan a la UE y que explican la actual situación habría que destacar la crisis económica, la inmigración masiva, el terrorismo y la gestión de las relaciones con terceras potencias. La percepción del trabajo de las instituciones europeas en relación a estas variables, por parte de la ciudadanía, no es positivo, lo que supone una razón considerable para emprender cambios que reconduzcan la situación en estas áreas. En caso contrario, la amenaza que representan para la UE opciones políticas populistas no harán sino aumentar.
Por Fígaro.
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