¿Sabrías cómo actuar ante un Atentado NBQR?

Los ataques por medio de atentados NBQR (nucleares, biológicos, químicos o radiológicos) aunque son uno de los modus operandi más improbables de entre las distintas posibilidades de ataques terroristas que hemos venido abordando en anteriores artículos de este Blog, son los que tienen un mayor impacto en la salud de multitud de personas y los que causan un mayor temor para la Policía, los Servicios de Emergencia, las Fuerzas Armadas y los Servicios de Inteligencia.

El interés por este tipo de atentados mostrado por algunos grupos terroristas, así como su elevado impacto en la sociedad, convierten a este tipo de ataques en una amenaza potencial para la seguridad internacional y, por ello, es importante estar informado sobre sus características y las posibles medidas preventivas (y reactivas) a aplicar.

En este artículo te mostramos qué son los atentados NBQR, quién los ha utilizado como modus operandi y cómo deberías actuar ante un atentado terrorista que pueda contener o utilizar material nuclear, biológico, químico o radiológico.

¿Qué es un atentado NBQR?

Un atentado NBQR  hace  referencia  a  ataques  terroristas  en los que se utiliza material nuclear, biológico, químico o radiológico. Comúnmente también se llaman armas de destrucción masiva o bombas sucias. La principal característica de este tipo de armas o de ataques es el gran impacto que provocan, tanto en número de víctimas como en su capacidad de destrucción.

No obstante, los sanitarios de las Fuerzas Armadas en España señalan en el “Estudio exploratorio sobre nivel de preparación del personal sanitaria en Defensa NBQ” publicado en el año 2017, que este tipo de ataques son poco comunes debido a la dificultad de encontrar los materiales necesarios y el conocimiento requerido para crear este tipo de artefactos.

¿Quién ha realizado atentados NBQR en la historia reciente?

En los únicos ataques nucleares que se han producido en la historia -en la Segunda Guerra Mundial- murieron unas 220.000 personas (140.000 en Hiroshima y 80.000 en Nagasaki). Por el uso de armas químicas, en la Primera Guerra Mundial murieron unas 85.000 personas en cuatro años de guerra.

En los últimos tiempos, los daños producidos por armas NBQR han tenido menos impacto que en el caso de ataques terroristas en los que se han empleado únicamente explosivos o vehículos. Estos son los ataques biológicos y químicos de nuestra historia más reciente:

• El uso de agente naranja en la guerra de Vietnam por parte de Estados Unidos en los años 60.
• El ataque con bombas químicas contra la ciudad kurda de Halabja, norte de Irak el 16 de marzo de 1988 por parte del ejército iraquí en el contexto de la guerra Irán-Irak. La masacre provocó la muerte de 5.000 personas.
• El atentado terrorista químico con Gas Sarín en el metro de Tokio en 1995 murieron 13 personas y unas 5.000 resultaron afectadas. Fue perpetrado por una secta religiosa japonesa (Aum Shinrikyo).
• Los atentados con ántrax en Estados Unidos en 2001 murieron 5 personas.
• El intento de asesinato del exespía ruso Sergei Skripal y su hija, Yulia, en Salisbury, Reino Unido en marzo de 2018 con el agente químico novichok.

Asimismo, se han producido diversos arrestos a presuntos terroristas por posesión de sustancias de esta tipología.

Por el momento no se han registrado casos de terrorismo con medios nucleares o radiológicos, aunque sí algunos ataques contra instalaciones nucleares.

En los últimos años, además, varios países occidentales han alertado a través de sus respectivos servicios de inteligencia de que los terroristas del ISIS han utilizado armas químicas en Siria, como cloro y gas mostaza, para atacar a sus enemigos.

¿Qué podemos hacer como ciudadanos en caso de un atentado NBQR?

En caso de producirse un atentado de esta tipología, es esencial que estés informado en todo momento a través de los medios de comunicación.

Ante todo, presta atención a las instrucciones y recomendaciones dadas por las Autoridades (ya sea a través de Internet, las webs oficiales o cuentas oficiales de redes sociales, como a través de televisión o radio).

En gran medida, los consejos preventivos a llevar a cabo dependerán del tipo de ataque que sea, del material utilizado y de la lejanía del lugar donde haya ocurrido. Dentro de este tipo de ataques, los biológicos o químicos son los más probables que un terrorista pueda llevar a cabo. Además, son aquellos en los que se pueden aplicar mayores medidas preventivas.

Por tanto, en caso de ser víctima de un ataque biológico o químico:

• Evita el contacto directo de las manos con ninguna parte del cuerpo, especialmente la cara.
• Evita comer, beber, fumar o ingerir cualquier tipo de sustancia o líquido.
• En caso de encontrarse mal, evita sentarte o tumbarte. Siempre hay que intentar alejarse del lugar del atentado y buscar ayuda.
• A no ser que se disponga de una máscara, protege la nariz y la boca con cualquier tipo de materia filtrante: ropa, esponjas, toallas, etc.
• Si alguien pierde la conciencia o se está asfixiando, asístele y ayúdale a salir de la zona de exposición.
• Una vez en lugar seguro, quítate la primera capa de ropa sin tocar directamente el exterior de la misma (se pueden utilizar guantes o bolsas en tus manos) y aisla la ropa en una bolsa de plástico. Si no se dispone de bolsa, lo mejor es dejarla en el suelo a una distancia prudencial e indicar su ubicación a la llegada de las Autoridades.
• Una vez sin ropa, lávate todo el cuerpo con agua y jabón.
• Evita dirigirte a casa o al hospital hasta que no lleguen los servicios de emergencia, de esta forma evitarás contaminar a otros ciudadanos.
• Los servicios de emergencia establecerán un punto de encuentro para tratar a las víctimas de forma segura. Sigue estrictamente sus indicaciones.

Hasta aquí este repaso por los consejos de prevención ante un ataque terrorista de tipo NBQR. Esperamos que con esta guía hayas adquirido nociones prácticas para saber cómo actuar y que mejores tus probabilidades de supervivencia. Si te ha resultado interesante y útil el contenido, te pedimos que contribuyas a crear una Cultura de seguridad reenviando este artículo a las personas de tu entorno.

A mayor conocimiento sobre el protocolo de actuación, menos víctimas habrá y más resiliente será nuestra sociedad ante este tipo de modus operandi en concreto y a la amenaza del terrorismo en general.

Por Fígaro.