Toda radicalización violenta es un proceso que tiene una serie de causas, factores desencadenantes y fases hasta su manifestación, independientemente de su índole, ya sea de carácter político, religioso, identitaria, de género o de cualquier otro tipo.
En este artículo te explicamos las causas y factores desencadenantes necesarios para que se produzca una radicalización violenta, con el objetivo de que puedas identificarlos, conocerlos y así prevenirlos, detectarlos y gestionarlos con eficacia a nivel personal o profesional.
Modelos de análisis de la radicalización violenta
Existen multitud de perspectivas para analizar las causas de la radicalización e incluso los indicadores que podrían ayudar a su prevención y detección.
Si aún no conoces en detalle los conceptos de radicalización, radicalización violenta e ideología radical y violenta, antes de continuar te lo explicamos aquí.
Una de las propuestas teóricas más completas y extendidas en lo que se refiere a la radicalización yihadista es la de Javier Jordán. Su propuesta de análisis sociopolítico se basa en tres niveles: macro, meso y micro.
- Nivel micro o individual: problemas de identidad, sentimientos de alienación, de discriminación, etc.
- Nivel meso: constituido por las redes sociales de apoyo o amistad.
- Nivel macro: esencialmente las condiciones económicas y políticas existentes.
Desde un punto de vista teórico y académico, los niveles nos permiten entender de forma holística la radicalización violenta, especialmente la radicalización yihadista, lo cual sin ninguna duda contribuye a mejorar las políticas públicas para prevenirla.
De todas las variables, factores y fases que se describen, algunas son más útiles o accionables que otras desde el punto de vista gubernamental, especialmente si se tiene en cuenta la capacidad de los diferentes actores y niveles institucionales (local, autonómico, estatal, europeo o internacional).
Modelos de análisis y eficacia institucional contra la radicalización violenta
Los tres retos estratégicos para la prevención de la radicalización violenta, las acciones violentas y/o el terrorismo son:
- Prevenir que surjan y se extiendan ideologías radicales y violentas.
- Detectar a los individuos que sufren una radicalización violenta lo antes posible para evitar que radicalicen a otros o lleven a cabo acciones violentas y/o terroristas.
- Gestionar de forma eficaz, eficiente y efectiva cualquier alerta de radicalización violenta para prevenir actos violentos y/o terroristas y poder aplicar un programa de desradicalización.
En este sentido, el modelo de análisis más útil será aquel que permita acercarse a la consecución de los objetivos estratégicosteniendo en cuenta las capacidades de cada persona, profesional e institución.
Desde LISA Institute, con tal de contribuir a la prevención, detección y gestión de los procesos de radicalización violenta en general, y no solo al de la radicalización yihadista, se ha creado un modelo de factores desencadenantes haciendo énfasis en el individuo radicalizado (nivel micro) y su entorno inmediato (nivel meso) desde una perspectiva de las medidas preventivas y de seguridad a implementar.
Este modelo que a continuación se propone, busca la practicidad, accionabilidad y utilidad para poder generar una serie de medidas específicas y acciones concretas que estén al alcance de la mayoría de instituciones públicas y que, por tanto, contribuyan eficazmente a la prevención de la radicalización violenta y sus consecuencias.
El modelo a su vez es aplicable a cualquier tipo de radicalización violenta ya sea ésta yihadista, de extrema derecha, de extrema izquierda, de violencia de género o de cualquier otra tipología.
Causas, Factores y Fases de cualquier radicalización violenta
Así pues, desde esta perspectiva, para que se produzca una radicalización violenta deben darse de forma secuencial, y como mínimo, los siguientes factores desencadenantes:
- Persona vulnerable: Una persona que pueda ser radicalizada.
- Catalizador: Un individuo ya radicalizado o el consumo de contenido radicalizante.
- No detección: Ineficacia de un entorno que detecte la potencial radicalización antes de que se produzca.
- No alerta: Ineficacia de un entorno que active la alerta temprana para actuar ante dicha radicalización potencial.
- No gestión: Ineficacia del sistema que debe gestionar diligentemente esa alerta de radicalización violenta.
A continuación se describen y desarrollan los 5 factores desencadenantes imprescindibles para que se produzca una radicalización violenta y, por tanto, una acción violenta y/o terrorista:
1. PERSONA VULNERABLE: UNA PERSONA QUE PUEDA SER RADICALIZADA.
Para que una persona pueda ser radicalizada es necesario que tenga ausencia de una combinación de los siguientes factores:
- Ausencia de valores cívicos, democráticos y de convivencia.
- Baja inteligencia emocional: capacidad de gestionar, comprender y manejar las propias emociones y las del resto de personas.
- Inexistencia de pensamiento crítico, autónomo e independiente.
2. CATALIZADOR: UN INDIVIDUO YA RADICALIZADO O EL CONSUMO DE CONTENIDO RADICALIZANTE.
Para que una persona se radicalice pueden darse básicamente tres escenarios:
- La existencia de una persona ya radicalizada que, directa o indirectamente, de forma intencional o no, contribuya a la radicalización violenta de otra persona.
- La existencia de contenido radicalizante (páginas web, revistas, textos, vídeos, etc.) que contribuyan a la radicalización violenta de una persona.
- Una combinación entre una persona o personas ya radicalizadas y el consumo de contenido radicalizante.
Para conocer los protocolos de actuación ante una posible radicalización violenta te recomendamos este artículo y si quieres ampliar la información sobre propaganda yihadista puedes hacer clic aquí.
3. NO DETECCIÓN: INEFICACIA DE UN ENTORNO QUE DETECTE LA POTENCIAL RADICALIZACIÓN VIOLENTA ANTES DE QUE SE PRODUZCA.
Para que se produzca la radicalización violenta, es necesario que las personas de su entorno inmediato, aquellas que más tiempo pasan con el individuo o que mejor le conocen:
- Estén radicalizadas.
- En caso de no estar radicalizadas:
- No tengan una relación con el individuo basada en la comunicación y la confianza, impidiendo así el conocimiento mutuo, así como el intercambio y expresión de pensamientos, opiniones y reflexiones.
- No tengan conocimientos sobre indicadores de radicalización violenta.
Asimismo, en los que se refiere al contenido radicalizante, para que se produzca una "auto-radicalización" también es necesario que las empresas tecnológicas que albergan redes sociales, contenidos o sistemas de comunicación donde se comparte información o contenidos radicales violentos:
- No se vean obligadas a comunicar a los autoridades este tipo de conductas.
- No dispongan de la tecnología para automatizar la detección de este tipo de conductas.
4. NO ALERTA: INEFICACIA DE UN ENTORNO QUE ACTIVE LA ALERTA TEMPRANA PARA ACTUAR ANTE LA POTENCIAL RADICALIZACIÓN VIOLENTA.
Para que se produzca la radicalización violenta también es imprescindible que las personas que puedan detectar o hayan detectado la radicalización violenta:
- No entiendan que la radicalización violenta es negativa para el individuo radicalizado, para su entorno y para la sociedad en general.
- No comprendan que las alertas tempranas son la única fórmula para evitar que una posible radicalización violenta se acabe consolidando y que pueda derivar en actos violentos o terroristas.
- No confíen en el sistema institucional y en sus organismos públicos (Servicios sociales, Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, Sistema Judicial, etc.)
- No dispongan de conocimientos para saber cómo deben actuar en esta situación.
5. NO GESTIÓN: INEFICACIA DEL SISTEMA QUE DEBE GESTIONAR DILIGENTEMENTE ESA ALERTA.
Para que se produzca una radicalización violenta, a su vez, también es necesario que las personas, profesionales, organismos públicos e instituciones que deben gestionar la alerta de posible radicalización violenta:
- No conozcan en profundidad cómo se producen las radicalizaciones violentas en función de la ideología violenta imperante.
- No dispongan de los conocimientos necesarios para validar la posible radicalización y graduar así su priorización de gestión en base a la fase en la que se encuentra y su potencial peligrosidad.
- No tengan los medios necesarios para poder reaccionar de forma rápida y temprana, aplicando las medidas de seguridad proporcionales para evitar el estigma y criminalización de la persona en proceso de radicalización violenta, a la vez que garantizando la mitigación y evitación de la amenaza.
- No dispongan de procedimientos de coordinación interinstitucional para que los diferentes organismos responsables cooperen en la prevención, detección y gestión de este tipo de amenazas.
- No tengan sistemas de información compartidos para que todos los organismos responsables actúen con la diligencia debida y en el momento más adecuado.
Cada una de las cinco causas o factores desencadenantes, a su vez, constituyen fases de la radicalización violenta. En cada una de dichas fases pueden implementarse una serie de medidas que permiten prevenir, frenar o evitar el avance en la radicalización violenta.
Si quieres conocer los indicadores o actos visibles de cualquier radicalización violenta, haz clic aquí. Conocerlos bien te ayudará a identificarlos, graduar el nivel de riesgo en el que se encuentra la radicalización violenta y alertar a las autoridades más eficazmente.
Por Fígaro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario